La CNMV regula la publicidad con criptoactivos
Finalmente la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha tomado cartas en el asunto. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicaba este enero la circular 1/2022 desarrollada por la CNMV que regula la publicidad de criptoactivos cuando son presentados como un objeto de inversión. La regulación para el trading en general ya existe y los brókeres online están obligados a publicar mensajes de advertencia en sus sitios web. Con el trading con criptomonedas la situación era diferente debido a la novedad de esta actividad y por la aparición de numerosas apps de comercio exclusivo con criptoactivos.
A través de la Circular 1/2022 la CNMV quiere regular la publicidad de brókeres con criptoactivos. ©sergeitokmakov/Pixabay
La publicidad de apps de trading ha, literalmente, estallado. Cada vez son más los brókeres online que ofrecen este comercio en exclusiva. Como ocurre con cualquier otra forma de trading con activos bursátiles, los riesgos de perder gran parte de la inversión son muy reales, especialmente a sabiendas de la inestabilidad de los precios de cambio de las criptomendas que han sufrido en estos primeros meses del año no pocos reveses.
Aunque la inversión en criptoactivos no esté regulada, la CNMV se ha decidido a desarrollar una regulación acerca de su publicidad cuando son ofrecidos como objeto de inversión. Esta regulación ha sido publicada por el BOE, se trata de la Circular 1/2022.
Definiendo el comercio con criptoactivos
La CMNV reconoce que la importante presencia de los criptoactivos en el sistema financiero hace necesaria una regulación que proteja a los inversores de los evidentes riesgos que entraña la inversión en estos productos financieros que, además, no están regulados.
El pasado noviembre hubo un cierto revuelo por el anuncio protagonizado por el conocido jugador de fútbol Andres Iniesta en donde afirmaba que estaba aprendiendo a iniciarse con el trading con criptomonedas. El anuncio era del bróker Binance. La CNMV le respondía al jugador que antes de recomendar la inversión en criptoactivos es necesario ser consciente de los riesgos que lleva aparejada.
Interesante en este sentido ha sido la definición de criptoactivo que se da en la Circular 1/2022 publicada por el BOE: “la representación digital de un derecho, activo o valor que puede ser transferida o almacenada electrónicamente, utilizando tecnologías de registro distribuido u otra tecnología similar”. También tiene gran importancia la definición que se aporta para los proveedores de servicios sobre criptoactivos, que incluye:
- la negociación de criptoactivos en plataformas
- la compra, venta o permuta de criptoactivos
- el asesoramiento sobre inversión en criptoactivos
- la gestión de carteras de criptoactivos
- cualquier forma de remuneración de los criptoactivos
- servicios o actividades que tengan por objeto la comercialización de criptoactivos.
Fuente: BOE: Circular 1/2022
Todas las comunicaciones comerciales que sean susceptibles de ser consideradas bajo la rúbrica de comercio con criptoactivos deberán llevar el siguiente mensaje de advertencia:
“La inversión en criptoactivos no está regulada, puede no ser adecuada para inversores minoristas y perderse la totalidad del importe invertido.” Circular 1/2022
Muy en el sentido de lo que hemos visto ya para la publicidad de los casinos online y para las apuestas deportivas, por ejemplo, en lo que concierne a las promociones de captación de nuevos clientes, en la circular del BOE se hace muy claramente explícito el lenguaje de la publicidad que ha de ser sencillo y que no conduzca a falsas expectativas:
“se utilizará en ella un lenguaje sencillo y fácil de comprender y se evitará la omisión de información relevante o la inclusión de información ambigua, sesgada, incompleta o contradictoria que pueda inducir a confusión. Los artículos publicados por cualquier medio o cualquier comunicación que sea patrocinada o promocionada deberán incluir una mención clara y visible de esta condición.”
Sin duda se trata de un paso adelante en un ámbito que atrae a muchos pequeños inversionistas. Aún queda un gran camino por recorrer para crear un ámbito auténticamente responsable.
