Noruega, hacia una ley nacional del juego

Noruega da un primer paso para unificar las distintas legislaciones que regulan el sector de las apuestas y los juegos de azar en el país. Tras una consulta pública, que sigue abierta hasta finales de septiembre, el Ministro de Cultura remitía el borrador de ley nacional a la Comisión Europea para su aprobación.

Edificio de Oslo con la fachada de cristal.

El país escandinavo es uno de los pocos países dentro del mercado europeo que no cuenta con un sistema de licencias múltiples. En esta nueva ley nacional, Noruega mantiene el monopolio de las empresas estatales a pesar de las voces que abogan por un libre mercado. ©Arvid Malde/Unsplash

El pasado 30 de mayo, el ministro de Cultura e Igualdad, Abid Raja, abría una consulta pública con el objetivo de unificar en un mismo marco jurídico las tres leyes por las que se rige el sector de las apuestas y los juegos de azar en el país: la Ley sobre el Juego (1992), la Ley sobre Lotería (1995) y la Ley sobre Totalizadores (1927).

En la petición del ministerio al parlamento noruego, sin embargo, Raja señalaba que la consulta no estudiaría el monopolio estatal en materia de apuestas, juegos de azar y lotería. Bajo esta nueva ley, Norsk Tipping y Norsk Rikstoto continuarían siendo los dos operadores autorizados para ofrecer servicios de apuestas, juegos de azar y lotería, si bien estarían bajo un mayor control del gobierno.

Antes de la fecha de cierre de la consulta, previsto para el próximo 29 de septiembre, el ministerio notificaba a la Comisión Europea esta unificación. De aprobarse la nueva ley, el juego pasaría a ser competencia del Ministerio de Cultura, incluidas las apuestas a carreras de caballos, las cuales están actualmente bajo supervisión del Ministerio de Agricultura y Alimentación.

La consulta también recogía opiniones sobre permitir el uso de loot boxes o cajas recompensas por su potencial adictivo, un tema de cadente actualidad en otros países europeos, incluidos España. En declaraciones oficiales Abid Raja, su ministerio pretende con este paso prevenir los problemas derivados del juego compulsivo, proteger los intereses de los grupos más vulnerables y combatir los grupos organizados que se esconden tras esta industria.

Noruega, el último bastión del control estatal

En pleno auge de las casas de apuestas y casinos online, Noruega, estado miembro del Espacio Económico Europeo (EEE), es uno de los pocos países que resiste ante el avance del libre comercio en el mercado europeo de las apuestas y los juegos de azar online. Los operadores internacionales tienen prohibido ofrecer sus servicios en el país escandinavo y, desde 2010, los bancos noruegos están obligados a cancelar pagos realizados a operadores, una medida similar que algunas empresas como Visa están aplicando en Alemania.

Sin embargo, la realidad es bien distinta. En mayor de este año, un informe de la Universidad de Bergen comisionado por la Autoridad Noruega del Juego apuntaba un preocupante aumento del 62% de la ludopatía en el país. Según la encuesta, se estima que 122.000 personas están en riesgo. La Asociación Noruega de Industria del Juego Online volvía a pedir a las autoridades acabar con el monopolio estatal actual que, consideran, ser el causante del aumento de los casos de ludopatía.

En una entrevista al Director General de la Autoridad Noruega del Juego, Atle Hamar, confirmaba que el 70-80 por ciento de las llamadas recibidas por problemas de juego compulsivo son de jugadores que apuestan en operadores internacionales.

Coincidiendo con el anuncio de estos datos, el parlamento noruego aprobaba una ley para prohibir la publicidad y el acceso a páginas ilegales de juegos y apuestas. Con esta medida, el ejecutivo pone fin a una laguna jurídica que llevaba permitiendo a los portales internacionales anunciar sus productos en Noruega desde el exterior desde 2017.

La Asociación Europea de Apuestas y Juego (EGBA, por sus siglas en inglés) lleva varios años abogando por la claudicación de este monopolio estatal para implementar un sistema de regulación múltiple que proteja a los jugadores en Noruega y aumente la canalización del sector regulado.

“Dado que los monopolios limitan las elecciones de los consumidores, no es sorprendente que aproximadamente la mitad de los jugadores en Noruega opten por páginas web internacionales que son más atractivas, porque éstas ofrecen posibilidades de apuestas más competitivas y juegos más atractivos que el monopolio estatal. Esta situación socava la efectividad general de las regulaciones de las apuestas online de Noruega, priva al estado de valiosos ingresos fiscales y lleva a los jugadores noruegos a jugar en sitios web extranjeros donde no están protegidos por las leyes noruegas.” EGBA, en nota de prensa

Publicaciones similares